Algo de paz
Te pide luz mi mente, te pide luz mi vida,
te pido por favor que en estos malos días.
Dios acompáñanos, brindanos Fe y amor
para poder crecer con esperanza alguna.
Algo de paz, algo de paz.
Algo de paz, algo de paz, hoy día.
Pareciera que, durante este tiempo que ya se hizo largo; las malas noticias, el miedo, la impotencia y la soledad fueron de a poco quitándonos la paz. Y sin esa paz que sutil y necesariamente nos pone en eje con nosotros mismos, nos hallamos perdidos y quizás inmersos en la desesperación de la pasividad y el silencio, o en la angustia de pensamientos que giran y giran, agrandándose hasta parecer gigantes invencibles. Así de necesaria es la paz que nos puede estar faltando.
Y conociendo nuestro Padre esta necesidad, solo quiere regalarnos, por su inmenso Amor, eso que necesitamos. Pero no puede concedernos la gracia de la paz interior si antes no se la pedimos; y no le podemos pedir nada si antes no confiamos en que Él nos lo va a conceder.
Por eso, en medio de la oscuridad, primero toca confiar. Así, reconociendo nuestra condición de hijos necesitados y al Padre amoroso que espera nuestra súplica, podemos lanzarnos confiados a sus brazos diciendo - o cantando - “te pide luz mi vida”.
¿Qué cosas me están quitando la paz? ¿Estoy necesitando esa paz hoy? ¿Se la pido confiadamente a Dios?
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Y te dejamos los acordes por si te dan ganas de tocarla:
Algo de paz
RE FA#m
Te pide luz mi mente, te pide luz mi vida,
MIm SOL LA
te pido por favor que en estos malos días.
Dios acompáñanos, brindanos Fe y amor
para poder crecer con esperanza alguna.
RE MIm
Algo de paz, algo de paz.
SOL LA RE
Algo de paz, algo de paz, hoy día. (bis)
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